miércoles, 1 de junio de 2011

50 razones para ver y estudiar "The Wire"


Omar Little y Jimmy McNulty, dos piezas claves


The Wire (2002-2008) es la serie de televisión que hasta el momento llevó más al límite los artificios de este lenguaje audiovisual y modo narrativo. En años donde el formato se bifurca precipitadamente, una subjetiva aproximación sobre la importancia de una serie que analiza con precisión y fidelidad la ciudad de Baltimore, Maryland. Una entrada por la ventana a los Estados Unidos de América.



“...y todas las piezas importan”

Lester Freamon (Episodio “The Wire”, Temporada 1)


But I ain't never crossed a man that didn't deserve it
Me, be treated like a punk, you know that's unheard of

Coolio, Gangsta’s Paradise



1.
The Wire es la serie de televisión que hasta el momento llevó más al límite los artificios de este lenguaje audiovisual 2. Aquellos que la señalan como la gran novela en lo que va del siglo XXI, bajo semejante declaración, no erran 3. Lo que comprende la obra: sus partes por separado y como unidad 4. La ciudad de Baltimore, el tablero de ajedrez. 5. Sus piezas, la evolución, involución, y el tránsito de sus personajes (reyes, peones, caballos, torres, alfiles), sin excepción alguna. A modo de explícito ejemplo, la escena del “ajedrez”, cuando Dee Angelo enseña a jugarlo a Bodie y Wallace utilizando metáforas (The Buys, Temporada 1) 6. La apertura del campo de estudio para abarcar la ciudad de Baltimore: la policía, las calles, la delincuencia, las drogas, el sindicato de trabajadores de su puerto, la política, el sistema educativo y los medios de prensa 7. Baltimore, ciudad en su mayoría de población afroamericana, y su juego: “It’s all in the game”. Lo que sucede en la ciudad, en sus diferentes aristas. 8. El Poder y sus armas: balas, dinero, trajes y maletines 9. El nombre de la serie, The Wire: las escuchas telefónicas, los pinchazos a la línea como puntapié inicial a la Mise-en-scène 10. El puntilloso trabajo de David Simon, su creador 11. Las presencias de algunos de sus colaboradores: Dennis Lehane, Rafael Álvarez y Georges Pelecanos (escritores, guionistas); Robert Colesberry, Joe Chapelle, Ed Bianchi, Agnieszka Holland (directores) 12. La primera escena de la serie (que inicia con la imagen de la línea de sangre sobre el pavimento) 13. Jimmy McNulty: entre el arquetipo del policía moderno, el padre de familia y el terco borracho. Su perseverancia dentro del descontrol 14. Omar Little, su presencia en cada escena: temible con su escopeta y su chaleco antibalas, temible en sus palabras, su silbido y la cicatriz que le recorta el rostro; los niños lo ven venir, corren y gritan para avisar “¡Ahí viene Omar!”. Los códigos y la sobria homosexualidad del hombre más temible de los barrios bajos de Baltimore 15. La dualidad dialéctica entre los gángsters Avon Barksdale y su mano derecha, Russell “Stringer” Bell: los negocios según la escuela de la calle y la universitaria 16. El hilo narrativo de la serie, sumiso a los griegos Sófocles y Esquilo, a los rusos (desde Gorki hasta Dostoievski) y a clásicos ingleses como Shakespeare o Dickens. El tiempo manipula a los personajes, y no viceversa. Toda una novedad en una serie de televisión, donde los minutos suelen ser tiranos y comprimen argumentos 17. En su momento de estar al aire (de 2002 a 2008) no contó con demasiados espectadores; estos preferían otras series. Tras su ninguneo durante esos años, el paso del tiempo le ha devuelto su jerarquía. Un dato al respecto: Baltimore, al ser una ciudad con mayoría de ciudadanos afroamericanos, y la vida de éstos como protagonistas en esta serie en particular, para algunos, atentó directamente a su popularidad en ratings de espectadores. Lo referido en la razón 16 también influyó: el manejo de la trama, de los tiempos y recursos de narración le jugaron en contra ante un público mainstream 18. Cierta crítica la valoró en su momento, y le hizo justicia. La serie nunca estuvo sola, más allá que estuvo a punto de ser cancelada 19. The Wire es la serie de televisión “anti CSI” por excelencia 20. Las escuchas, los pinchazos en las comunicaciones como métodos (útiles como inútiles) utilizados por la policía para perseguir a los criminales 21. La incompatibilidad entre partes (piezas-personajes): los que mantienen los “códigos”, y los que ya los perdieron o nunca los tuvieron. La primera temporada mantiene un abismo de diferencias con la quinta, con denuncias de los propios protagonistas 22. Las diferentes versiones de la canción Way down in the hole, de Tom Waits (Temporada 2), interpretada por The Blind Boys of Alabama (Temporada 1), The Neville Brothers (Temporada 3), los jóvenes de Baltimore DoMaJe (Temporada 4), y Steve Earle (Temporada 5) 23. Las aperturas de los episodios, previas a los créditos iniciales 24. Los epígrafes en blanco, sobre fondo negro. Uno de éstos, quizá resume lo que representa The Wire: “...y todas las piezas importan”, dicha por Lester Freamon, el metódico encargado de las escuchas telefónicas (The Wire, Temporada 1) 25. La primera escena de este mismo capítulo: el cuerpo torturado y ultimado de Brandon (novio de Omar) sobre un automóvil al aire libre como mensaje, y la cámara recorriendo un cable para ingresar a la propiedad, la habitación del joven Wallace: un tributo del director del capítulo Ed Bianchi a Alfred Hitchcock en su escena inicial de Psycho (1960) 26. El proyecto Hamsterdam 27. Las idas y vueltas de los policías Herb y Carver 28. Omar Little testificando en el juicio al gángster Bird (All prologue, Temporada 2) 29. Chris y Snoop: su aura de ejecutores y sepultureros en el alternativo cementerio 30. El joven Marlo Stanfield. Sus semejanzas con Russell Bell y diferencias de líder ante Avon Barksdale, Wee-Bay o Proposition Joe. Marlo como símbolo del paso del tiempo: la nueva forma de operar, la quimera del nuevo capo gángster 31. Los funerales en el bar de los policías. El contraste narrativo entre uno de éstos y el de Tasha, amiga de Omar Little muerta tras una balacera (Dead Soldiers, Temporada 3) 32. Bubbles y su lucha interna como adicto, como persona 33. El estoicismo de dos personajes: Cedric Daniels (su ascenso como policía, entre el deber y su ética) y Mouzone, el implacable asesino a sueldo (“Lo más peligroso en Estados Unidos es un negro con carnet de biblioteca”, Storm Warnings, Temporada 2) 34. Cutty y su gimnasio de box: un breve espacio de inclusión social 35. Butchie, el oráculo. El amigo ciego de Omar y su tesorero personal. Su personaje vale cada una de sus palabras, de las escenas que le pertenecen. 36. El ascenso del político demócrata Thomas Carcetti, su llegada al poder y su permanencia 37. El diario de la ciudad, The Sun. Como la policía de Baltimore, debe hacer mucho con poco 38. Augustus como editor del diario, juez dentro del baile, del columpio de los medios de prensa 39. El aspecto dickensiano: paralelismo entre la pluma del escritor inglés sobre la orfandad (Oliver Twist) y el tratamiento de la serie sobre los vagabundos de Baltimore, los que quedan detrás (Temporada 5) 40. Los soldados-peones Dee Angelo y Bodie 41. La educación según Howard “Bunny” Colvin, del proyecto Hamsterdam a las aulas de la escuela pública de Baltimore 42. Las corbatas de Bunk 43. La estructura de los sindicatos del puerto de Baltimore. Frankie Sobotka y su aura de “working class (anti)hero” 44. El contraste entre el concepto de familia según los Sobotka (Frankie, Ziggy y Nick) y los “griegos” 45. La pelotudez e inocencia de Ziggy 46. La simpatía que puede despertar el político chanta Clayton Davis y su célebre blasfemia de cabecera 47. La famosa escena del “fuck”, de McNulty y Bunk: ambos llegan a una escena de crimen y únicamente dicen la palabra 38 veces (Old Cases, Temporada 1) 48. La cuarta temporada basada en el sistema educativo de la ciudad: la relación entre el ayer metódico policía y luego novato maestro Prez, y sus alumnos (Namond, Michael Lee, Randy, Duquan, Donut) 49. El niño Little Kenard y su relación con la denuncia final del film Ciudad de Dios (2002) 50. Lo que dejó Omar Little en su camino, y su posible analogía con el personaje del pibe Michael Lee. La continuidad del ciclo, el eterno retorno.




The Wire (2002-2008)
HBO




It came at night...


9 comentarios:

kingpin dijo...

n' all the pieces matta'

Ivan | Segunda Mano dijo...

The Wire es la serie mas grande que he visto jamás; una serie rápida, con ritmo, llena de buenos personajes, metódica, real, compleja y bueno bastante fascinante..
Donde cada capítulo es digno de admiración técnica y donde los personajes están reflejados de una forma tal en la que irreversiblemente congenias con ellos de alguna forma y es que el verdadero protagonista de esta serie es el ser humano.

Mullin - Tiendas Muebles dijo...

Yo he de reconocer, aún a riesgo de ir contracorriente que no me gusta the Wire. Me parece en primer lugar aburrida, nunca llega a engancharme, los personajes son demasiado arquetípicos (el poli es bueno pero no perfecto, los delincuentes negros y buenas personas, etc.). La considero demasiado pretenciosa.

Bejerano - Piscinas Prefabricadas dijo...

Unaa buena idea y sin duda muy innovadora, para mi lo tiene todo. Merece la pena verla.

Alfombras dijo...

Cierto es que la serie tiene ritmo y es bastante llamativa visualmente per para mi, los personajes deberian estar mejor pensados.

Eloisa | portaextintorhogar.com dijo...

The Wire me convencio pero aunque suene raro no consiguio engancharme del todo a su esencia.

Anónimo dijo...

vi la primera temporada y es buena pero no me termina de enganchar.. nose, siento que algo le falta, desgraciadamente para esta serie ya me habia visto THE SHIELD y aunque trata de algo diferente no puedo dejar de compararlas y pierde THE WIRE

beirut vera dijo...

51 Que nunca sepamos qué hizo Cedric Daniels hace años, en el Este. 52 Que todos no obstante tengan un expediente. 53 Lo que comprende al secreto y lo pertinente (Rawls en el bar). 54 La distancia entre lo verdadero y lo justo. 55 Los desaparecidos. 56 "But Marlo is a serial killer", y como epígrafe general el Oso Rojo: ¿No sabés que toda la guita es afanada?

Twin Peaks, Deadwood y esta, lo mejor.

abrazo, d/d

zalayeti dijo...

(57 ah, Y la pregunta clave de la política, de Hamlet, Paco y la Conmebol: el producto o el territorio.)